Derecho penal y nuevas tecnologías

Los seres humanos se enfrentan a una crisis civilizatoria cuyas consecuencias harán necesario un nuevo Derecho penal con capacidad suficiente para reconducir los conflictos que se generarán. En este sentido, resignificar este Derecho e iniciar una transición hacia otras formas de mirar la función de la pena es algo fundamental.

Las nuevas tecnologías están avanzando a una velocidad que nos llevan a la cuarta revolución industrial, con cambios en nuestros hábitos de consumo, formas de relacionarnos, etc. Cambios que también afectan a las Administraciones Públicas, que están cambiando la forma de trabajo y gestión de personal implementadas desde hace más de cien años, y en el que los robots puede que tengan un papel fundamental.