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Nos encontramos en una época en la que la información y noticias nos superan. En un tiempo donde hay más datos compartidos que minutos tiene el día... ¿En qué nos fijamos? … ¿noticias? ¿documentales? ¿artículos? ¿libros?...

La programación televisiva, los informativos, los temarios reglados... todo eso nos aporta una importante base informativa. Todo eso nos aporta un conocimiento, en cierto modo obligado.

Pero, ¿controlamos esa información?

Consumimos de forma directa los mensajes de un político, de un youtuber, o de un periodista según la trasmiten, pero pocas veces tenemos el tiempo de contrastarla. De valorar y aportar con nuestro propio criterio.

El control de la sobreinformación que tenemos requiere de tiempo, de interés y de ganas de aportar algo a lo oído, visto o leído.

Ciencia y conocimiento

Lo mismo pasa con la mayoría de campos científicos. Los interesados que cada día leemos nuevos artículos, o que estamos suscritos a publicaciones que nos interesen estamos casi igualmente expuestos a todo tipo de comentarios.

Lo que ahora rezan las pseudociencias aumenta su protagonismo cada día, y esto ¿por qué ocurre?

A menudo, el ritmo de vida no nos permite pararnos a pensar en lo que nos dicen. No nos paramos a reflexionar tras haber leído una noticia. Solo nos quedamos con el primer titular y eso es lo que compartimos.

La divulgación tiene un papel protagonista en este reparto. La divulgación nos ayuda a ampliar y conocer datos de los temas que deseamos saber más; es la encargada de compartir toda esa información ya existente con todos nosotros.

Y ¿Cómo llegamos a ella?

Ahora podemos tener una información sin filtros. Acercarnos a una ciencia directa y sin sesgos, y para ello, qué mejor que sean los propios científicos quienes nos la cuenten.

En cada edición de Pint of Science nos encargamos de que los avancen científicos lleguen cada vez a más gente. Así, cada mes de mayo, los bares de toda nuestra geografía colaboran en esta ampliación de conocimientos cediendo sus espacios a los representantes de las instituciones científicas de nuestras ciudades.

Sí, una vez al año, la ciencia sale de bares para unirse a los tan extendidos debates en la actualidad.

 

Así que, futuro público de Pint of Science... abrid esos cerebros que ¡nos vemos en los bares!

¡ARRIBA LOS VASOS!

 

Texto: A. Belén Peña  - Edición Blog Nacional y Equipo Local Madrid -

 

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